Descripción de la propiedad
Un lienzo en blanco con un legado distinguido en Castellana. ÚNICA Inmobiliaria se enorgullece de presentar una oportunidad de inversión sin parangón en el exclusivo barrio de Castellana, entre las emblemáticas calles de Hermanos Bécquer y Serrano. Esta propiedad se ubica en una señorial finca de los años 20, un testimonio de la arquitectura clásica madrileña. Con una superficie catastral de 241 m², esta vivienda se ofrece completamente demolida, un lienzo en blanco listo para materializar un proyecto de vida a medida. Goza de una luminosidad excepcional al corresponderle una tercera planta con orientación sur, techos de 3 metros de altura y amplios ventanales que prometen ser el marco de un interiorismo sublime. Se presentan dos alternativas de distribución diseñadas para maximizar el potencial de la propiedad: Alternativa 1: Un majestuoso salón-comedor, conectado a un comedor formal, un aseo de cortesía y una zona de noche con cuatro dormitorios (tres dobles y uno de servicio). La suite principal cuenta con baño integrado, mientras que los otros dos dormitorios dobles comparten un baño. El dormitorio de servicio también dispone de baño en suite. En total, cuatro dormitorios y tres baños. Alternativa 2: Un salón-comedor igualmente imponente, un aseo de cortesía y una zona de noche que alberga tres dormitorios dobles, cada uno con su propio baño en suite. Ambos proyectos incluyen una cocina de diseño independiente equipada con electrodomésticos de alta gama. Las calidades propuestas incluyen suelos de tarima, aire acondicionado, y acabados de lujo que realzan los 3 metros de altura de los techos sin muros de carga. Una de las principales ventajas de esta inversión es la actualización integral del portal y las zonas comunes del edificio, que se acometerá sin coste alguno para el futuro comprador. El ascensor original de madera será restaurado con una estética moderna, mientras que el portal y la escalera recuperarán su esplendor señorial. Esta propiedad es una oportunidad de residir en un barrio que es sinónimo de distinción, un epicentro de cultura, gastronomía y alta diplomacia, con la serenidad que solo la tradición puede ofrecer.